Lo primero es llegar hasta Beneixida para realizar la zona del woodparck hasta las sendas donde me dejé las costillas pegadas en una roca...
De ahí a la Llosa de Ranes a por un almuerzo completo por 3,5€ que "quita er sentío". Después subimos Santa Ana en dirección a les Salines para buscar unas sendas increibles...
Ruta del 10 con el retorno de Noel.
UN CARRUSEL HOGAREÑO CON SALIDA POR EL BARRANQUET EN DONDE UN PEQUEÑO GEISER TARQUIMOSO Y RADIACTIVO NO CONSIGUIÓ QUE DIERAMOS LA VUELTA.
SENDAS Y CAMINOS DOMESTICOS IDONEOS PARA EL RECREO VISUAL Y EL RETOZO PERSONAL A TIRO DE PIEDRA QUE A VECES SE NOS OLVIDAN QUE ESTAN AHÍ: LA SENDA DEL UNO, EL PAS DEL LLOP, CIRCUITO DE LA BARRACA, ETC.
LA NOTA LUCTUOSA DE LA JORNADA LA PROTAGONIZO EL ARRAPADOR, CONSAGRADO RECORTADOR DE FACTIBLE FILIGRANA Y VIRGERIA GENEROSA, QUE EN LA SUERTE DEL DESCENSO, TRAS ARRIESGADO RECORTE CON SALTO Y TIRABUZÓN DOBLE, FUE CRUENTAMENTE VOLTEADO EN SU QUIEBRO DERIVANDO EN APARATOSA Y FEA CAIDA. NO OBSTANTE, IGNORANDO LAS INDICACIONES DE SU APODERADO, AUPOSE NUEVAMENTE A SU ALBARDA Y AGARRANDO LOS TRASTOS DE MATAR TERMINÓ LA FAENA CON SOBERBIO SALTO A PUERTA DE GAYOLA. TRAS EL DESGRACIADO LANCE, FUE ATENDIDO CON PRONTITUD EN EL MISMO ALBERO.
EN FIN ESTUPENDA VEGETACION, BUENA CUADRILLA Y FENOMENAL CLIMATOLOGIA, LO QUE SE DICE EN MI PUEBLO ……UN DIA PERFECTO PARA SER VACA.
BY ESCOTI.
Menos mal que los cascos tapan las canas… y las calvas, que si no… se nos crecen los chavales y llegamos a Barxeta al borde de la pájara.
En “La Casa” reunión del grupo, alivio de fluidos con retrato conmemorativo y cerciorados de la buena disposición de los penitentes de la “parada fallera” retomamos la marcha con menor frenesí y cadencia sabiendo cercana la meta del almuerzo y comentando la ubicación del Bar comienza el desaforado descenso. Al son del bufido de un quieto y expectante jabalí el grupo, antes disperso, se reúne en una piña derrapadora y saltarina que hace ladrar a todos los perros de las casetas y por fin cansados pero contentos llegamos, a la vez, a la población de Quatretonda (un poquito antes que el Quintopino).
Pasamos de largo el habitual Bar de la plaza ante la mirada impertérrita de policromáticas peñas foráneas que ocupaban las mesitas de la acera . Observados con curiosidad por las demostraciones de equilibrio de Tomás con una rueda, seguimos en busca del restaurante Casa Ricardo (no confundir con el mítico “Bar Ricardo”) el cual dispone de parking privado para bicis, doble pantalla de plasma para ver las carreras y unos bocatas espectacularmente deliciosos.
La vuelta por el “Camí vell de Beniganim” y la senda que discurre por un barranquito cerca de una granja de Toros, entre huertas sin vallas, se decidió rápida por motivos de tiempo y kilometraje (75Km en total). Y volvimos por asfalto. Puerto de Beniganim y caminito a casa por Enova hacia Cogullada y el lavadero al final del “cami de Materna”. Una gozada la ruta, sobre todo por el dosificado pero constante retorno de los trackers que van saliendo de las madrigueras invernales y que esperamos sean cada día más, pues siempre serás bien recibidos.
