En el punto de salida cuatro
bikers, y tras las primeras deliberaciones, el grupo decide emprender ruta en
solitario a pesar del ofrecimiento de los plataformas, y por lo que cuentan,
fue una buena decisión, por lo que dice el amic Tofe, la alternativa hacia la
senda del Piloto fue más que dura…
Con una temperatura nada usual
para estas fechas, atravesamos Materna en dirección al término de Carcaixent y
en poco tiempo alcanzamos Vilanova de Castelló. Primeras acalorás en la
ascensión hacia el primer cruce de la subida a Santa Ana, incluyendo el tiroteo
cerca de los chalets de la parte de bajo, y tras coronar emprendemos el primer
descenso por pista en busca de las rampas de la “Furgo”. Al amigo José se le
hace la conveniente explicación del nombre asignado a esta ruta.
Con las nubes amenazantes sobre
nuestros cascos, y el terreno especial, enfilamos las rápidas y a la vez traicioneras
trazadas del sendero, con un par de precipicios que trazamos con mucha, pero
mucha calma, ya que más de uno nos hemos dejado un peazo de salud por estos
lares.
Sin novedad llegamos al cambio de
trazado, y por la cada vez más asquerosa Senda Rosa, bajamos con el culito muy
apretao y sin mirar atrás… sabéis de que hablo, no?
Este tramo es genial, se hace muy
rápido, incluso para los bikers que no estamos muy doctos en la disciplina más
free, y cuando se alcanza el famoso túnel, un riachuelo nos recibe esperando a
que un mal paso o apoyo nos haga introducir los pies en sus frías aguas.
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Fotos de rigor y lanzados en
busca del merecido almuerzo en Beneixida, en casa Yolanda o Luighi. El bar a
tope, pero nos emplazamos en un rinconcito la mar de apañao. Bien servidos,
comidos y bebidos salimos en busca del remate de la mañana, y decidimos buscar
la Font Amarga para enlazar por arriba con Las Salinas, y dicho y hecho.
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Ya con el buche lleno el temor se
esfuma y la ascensión se hace muy rápida, con la mente puesta en las rampas de
Toboganlandia como recién ha bautizado Pascual el tramo que nos quedaba. Ya en
el primer tramo de enlace conectamos con un par de xicons de Carcaixent, con
cámara en lo alto del casco y muy fuertes. Decidimos continuar con ellos, y
disfrutamos como enanos, con cada curva, tobogán y escalón. Como se nota que a
base de pasadas le vamos quitando miedo a este tramo.
Ya todos bajo en la entrada a Les
Salines, cruzamos hacia Manuel y l’Énova, y por los caminos de siempre al lado
del tren llegamos como una exhalación a Cogullada. Despedida a los colegas del
retorno, y con el sentimiento de una labor bien hecha, alcanzamos la ruta del
colesterol hacia Alzira, con algún ataque sorpresa hacia los abuelitos y
pequeñajos, N.E.B. (no estamos bien).
Llegada a hora genial, con 50 km
al lomo y para tratarse de una ruta bastante rodadora, los tramos de senda y
pista la equilibraron.
Bueno, ya sabéis lo del domingo
11 de noviembre, que vienen a visitarnos los Americanos al poble, y nuestro
señor Alcalde D. Caiman nos convoca para recibirlos y dar una volteta por los
alrededores. No faltéis y avisad al primer edil para que avise al hostalero.
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